A partir de los 30 años, la piel va perdiendo volumen y luminosidad y aparecen los primeros signos de la edad. La zona de la cara es la parte del cuerpo en la que antes se manifiestan las marcas del envejecimiento, ya que la falta de colágeno y elastina provoca la pérdida de firmeza en las facciones y la aparición de manchas, ojeras y arrugas.

A parte de esa edad, hay otros factores que inciden en el estado de tu rostro. Una mala alimentación, o hábitos poco saludables, como la ingesta de alcohol o el consumo de tabaco, aumentan la probabilidad de tener un cutis apagado o deteriorado. Y es que, si no tienes buenos hábitos, el envejecimiento se acelera y se refleja en tu piel.

Queremos que luzcas un rostro joven y completamente natural, por eso nuestro tratamiento de rejuvenecimiento facial es totalmente personalizado. Realizaremos un estudio exhaustivo de tu piel y aplicaremos las mejores técnicas médico-estéticas, para que, en su conjunto, tengas un resultado óptimo.

Si es necesario, podremos compatibilizar el tratamiento de rejuvenecimiento con otros que también ofrecemos en nuestro centro, como el de eliminar las manchas o eliminar las ojeras, para así conseguir la máxima armonía y belleza en tu rostro.

Nuestros procedimientos médico-estéticos son completamente respetuosas con tu organismo, y tienen como objetivo aportarte una dosis extra de bienestar teniendo siempre en cuenta las necesidades de tu cutis.